ACS es una de las pocas constructoras del mundo con el suficiente músculo contratista para presentarse a una licitación pública con más de una oferta. Lo ha hecho en España con relativa frecuencia a través de filiales como Vias, Dragados y Cobra (ahora propiedad de Vinci). La multinacional española también emplea esta práctica en el exterior, por ejemplo, en Norteamérica, donde dispone de una potencia de fuego similar a la de España, con casi una docena de filiales entre empresas de la alemana Hochtief y las de la matriz española. Leer